La legendaria "Maestranza" es una cantina histórica ubicada en el centro de Guadalajara en la calle del mismo nombre, justo a espaldas y a dos cuadras del Palacio de Gobierno de Jalisco, cuenta la leyenda que hubo un Gobernador que antes de llegar a palacio, era un asiduo cliente del lugar, no había fin de semana que no estuviera en el bar taurino sentado en sus equipales tomándose una jarra de cerveza de barril con tarro, y terminaba con una botella de tequila Chamuco, la más popular, la más barata y la más consumida por los fans de la Maestranza.
Dicen que esta cantina abrió sus puertas en los años 30’s, la fundó don Francisco Jáuregui y la bautizó como “Bar Los Panchos”. En la década de los años 80’s era famosa por ser una cantina “pink” donde se concentraban la comunidad gay de esos años, el lugar era tan famoso, que incluso fue locación para filmar una película hollywoodense llamada "Justicia Salvaje" donde actuó nada más y nada menos que el legendario Charles Bronson, como justiciero y vengador de los criminales, que acechaban la ciudad en esos años, interpretando un papel de policía estilo James Bond, que se trasladó exclusivamente a la ciudad del crimen, para hacer justicia y combatir a los criminales que acechaban la ciudad, (ojalá que regresara ahora para que combatiera de frente a los criminales de hoy que nadie quiere enfrentar) principalmente a un perverso doctor muerte llamado Clement Molloch, (menos nocivo que el dr. Gatell) quien torturaba a sus víctimas hasta la muerte, el guion está basado en la novela titulada ‘The evil that men do’ escrita por R. Lance Hill, siendo el propio escritor quien adaptó el guion.
La trama está inspirada en la historia de la caza de los criminales nazis después del holocausto, el doctor muerte es una réplica del tristemente célebre Josef Mengele, y curiosamente la película se estrena el mismo año en que ocurre la muerte del agente de la DEA Kiki Camarena quien es torturado según EU por el doctor Machain con las mismas prácticas del doctor Molloch.  
Entre los escenarios y locaciones aparece la emblemática Maestranza, donde Charles Bronson defiende a su dama acompañante del nada más y nada menos temible “Hulk Mexicano” (Miguel Ángel Fuentes) a quien lo prensa de los huérfanos, y lo mata asfixiándolo con la pata en la garganta.
En esas escenas se alcanza a apreciar todo el museo y bar taurino “Los Panchos” exactamente como está hoy a 40 años de distancia, esas y muchas más escenas de Guadalajara aparecen en esa película, como el Hotel Francés justo a espaldas de Palacio de Gobierno, el impresionante mural de José Clemente Orozco en el Paraninfo de la UdeG, así como la presidencia municipal de Guadalajara, terminando con la Mansión Clover Lown ubicada en av. La Paz que parece una auténtica mansión de brujas, lugar donde el doctor Molloch, torturaba a las víctimas dando un espectáculo a los militares del régimen que habían entregado al condenado.
Años después llegó la segunda generación cuando cerraron el bar Los Panchos, pero un grupo de jóvenes emprendedores y talentosos, integrado por el famoso Claudio Javelli quien era dueño del famoso restaurant bar Las Palomas así como de la entrañable Bodeguita del Medio, se asoció con el famoso ruso Carlos Beloglovsky y con Alejandro González de la Peña, para reabrir el lugar y darle un nuevo concepto convirtiéndolo en la famosa Maestranza, como un homenaje a la Real Maestranza de Sevilla y a la calle donde se encuentra ubicada.
A partir de ese momento, la cantina se convirtió en el bar de moda de Guadalajara, había grandes filas para entrar a tomar una cerveza, jóvenes de todos los extractos sociales asistían a disfrutar la música del DJ,desde las chicas más "fresas" del ITESO, la UP y demás universidades, hasta los más borrachales que les gustaba la bohemia y la fiesta brava acudían al museo taurino que estaba de moda; políticos, actores, toreros, músicos, modelos y la chaviza, asistían a disfrutar  su cerveza de barril clara y oscura, que se servía en jarras de cristal con tarros helados.
No podía falta la botana que consistía en las tradicionales tortitas ahogadas, cacahuates y rines para acompañar las bebidas, la mayoría de los comensales pedían el famoso tequila Chamuco, envasado en una botella delgada que tenía en la etiqueta un chamuco con la leyenda “Si amanece nos vamos”, entre las figuras que asistían había placas que daban testimonio de su visita, en un pilar colgaba un letrero de madera que decía: “Aquí estuvo Juan Rulfo, gran escritor jalisciense autor de Pedro Páramo”, había otra que daba testimonio de la presencia de Juan José Arreola, y le faltaban muchas placas más que dieran fe de muchas figuras que pasaron por los pasillos de esa tasca taurina como la actual reina de España Leticia de Borbón, quien vivió en Guadalajara y frecuentaba tanto la Maestranza como el Barba Negra, también artistas como Fer el de Maná, y no podía faltar Alejandro Fernández que hasta un videoclip grabó en el museo taurino rodeado de chicas rebeldes quienes hicieron la coreaografía del video “Bandidas”.
Y así en la taberna taurina partió plaza un potrillo en el año 2010 que es conocido a nivel mundial por sus canciones baladas y rancheras, vestido como “el zorro” con pantalones negros de piel que acompaña con una camisa del mismo corte, aparece con el corazón partido en 4 porque son cuatro “bandidas” las que se lo quieren robar a besos y caricias, con su estilo matador canta dentro del museo taurino convirtiéndolo en una plaza de toros, como cuando desbordó la Plaza México, pero esta vez en una taberna mágica con años de historia que sus paredes gritan sobre sus icónicos personajes y las leyendas que se escribieron ahí, canta la letra que le compuso su compadre Joan Sebastian, el especialista "robacorazones". 
Uno de los personajes icónicos que visitó ese lugar a mediados de los 90s fue la actriz tapatía Lorenza Silva quien salía junto con el “sex simbol” Lorenzo Lamas “El renegado” en los anuncios de Bacardi filmado en las cascadas de Agua Azul de Chiapas, en los años 90s, una impresionante modelo que gozaba del museo taurino acompañada de amigos firmando autógrafos a todo aquel que se lo pidiera.
Y así sucesivamente muchos personajes pasaron por ahí, uno muy chitoso el famoso Chivigón un personaje único que su sola presencia hacía reir hasta el más apático con un metro y medio de estatura se tomaba hasta 10 jarras de cerveza y todavía quería más, ésas y otras historias más guarda esa emblemática taberna que frecuantó la mayoría de los tapatíos por más de una década hasta que cerró sus puertas en el año 2012 seguramente por problemas económicos, y volvió a revivir en plena pandemia con la remodelación que hizo Idolina Cosio, siendo la tercera generación que lo rescató, reinventándose hoy con su nuevo propietario Andrés Cárdenas y sus socios, quien comienza a fabricar un exquisito puro llamado "Maestranza" hecho de tabaco mexicano, manteniendo la esencia de la fiesta brava, convocando todos los jueves reuniones de peña taurina para hablar de toros y corridas con el maestro "Zapopan" gran torero retirado.
Que viva muchos años más esa tasca taurina que entre sus leyendas aseguran quienes lo vieron, hubo un Gobernador –antes de serlo– que se la vivía en ese lugar conquistando mujeres y se batía a golpes por ellas, bebiendo botellas de chamuco y festejando con sus amigos de la facultad y la política.
Incluso el último día de su gobierno, cuando entregó la gubernatura, quiso festejar en la Maestranza, pero al encontrarse cerrada, caminó unos pasos hacia la cantina La Fuente –en el centro histórico– para festejar el último día con amigos y colaboradores de su gobierno, hasta quedar inconsciente.